El Ayuntamiento de Barcelona ha impulsado por primera vez la Estrategia de Movilidad Turística (EMT) de Barcelona, dirigida y redactada conjuntamente entre el propio Ayuntamiento y Barcelona Regional, como medida del Plan Estratégico de Turismo 2020 (PET20).

El turismo es uno de los fenómenos más relevantes por la configuración de la ciudad del futuro y Barcelona, con 23 millones de visitantes anuales, se ha convertido en una ciudad turística en tiempo récord, consolidándose como uno de los principales destinos urbanos europeos con una clara tendencia al crecimiento. La actividad turística es hoy central en la configuración de la realidad urbana dado el uso específico del territorio, la intensidad de sus prácticas y sus efectos en la vida cotidiana. En este sentido, la movilidad es uno de los aspectos más determinantes en la configuración del destino.

La EMT nace fruto de la necesidad de dar respuesta a los retos para gestionar la ciudad, como consecuencia del aumento del número de turistas en Barcelona y la previsión de crecimiento a medio plazo. La EMT profundiza en el conocimiento de la movilidad turística con el fin de incorporarla como una parte inherente de la movilidad urbana, dejando de tratarla como excepcional, incorporando como propias las dinámicas, las demandas y las prácticas de la movilidad turística. Este es un ejercicio sin precedentes en Barcelona y un ejercicio inédito en las otras grandes destinaciones urbanas europeas. Anteriormente, nunca un documento había estructurado un análisis global de las pautas de movilidad turística con el objetivo de diseñar políticas urbanas.